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El Consorcio del Sector II de la Provincia de Almería para la Gestión de Residuos ofrece un servicio pionero que ha incrementado en un 550% la recogida de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos desde 2018
El Consorcio del Sector II de la Provincia de Almería para la Gestión de Residuos (CRSII) ha incrementado en un 550% la recogida de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEEs) desde la puesta en marcha en 2018 de su servicio de recogida a domicilio, totalmente gratuito para los usuarios. Ello ha supuesto no solo un incremento de las cantidades recogidas de este tipo de residuos de forma separada, y, por tanto, asegurando su correcto tratamiento, sino que también constituye un servicio pionero en la provincia de Almería y que facilita enormemente el reciclaje de esos aparatos.
La recogida de estos residuos para los vecinos de los municipios consorciados es a demanda y personalizada. El proceso es muy simple: los usuarios solamente tienen que llamar al Consorcio de Residuos del Sector II e indicar el tipo de residuo y su dirección. Recibida la petición, el Consorcio monta el dispositivo de recogida personalizado y en menos de 72 horas un operario se desplaza hasta el domicilio del solicitante, recogiendo en la puerta de su domicilio todos los aparatos eléctricos y electrónicos de los que se quiera desprender.
En el primer año de su implantación, la cantidad de RAEEs recogida por el Consorcio de Residuos del Sector II creció un 228%, pasando de 47.297 kilos en 2017 a 108.170 en 2018. En 2019, esta cifra subió a 134.385, en 2020 a 225.852 y en 2021 a 260.101, un 24%, un 68% y un 15% más con respecto al año anterior cada uno de ellos.
Este incremento anual de la recogida de estos residuos está motivado por una mayor concienciación general de la población frente al problema que supone la acumulación de residuos, en particular el de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, accesorios habituales en el día a día de la sociedad como teléfonos, tablets, lavadoras, frigoríficos, planchas, secadores de pelo o cepillos de dientes eléctricos, que una vez dejan de funcionar pierden su utilidad.
Estos aparatos contienen sustancias peligrosas como mercurio, plomo, arsénico, fósforo, cadmio, aceites o gases que pueden provocar daños a las personas que los manipulan y que además afectan a la capa de ozono y al calentamiento global como clorofluorocarbonos (CFC), hidroclorofluorocarbonos (HCFC), hidrofluorocarbonos (HFC), hidrocarburos (HC) o amoniaco (NH3), que si bien son necesarias para garantizar su funcionalidad, pueden emitirse al medio ambiente o ser perjudiciales para la salud humana si, una vez que se convierten en residuos, los aparatos no se gestionen y se tratan adecuadamente.
Por ejemplo, un frigorífico mal reciclado puede llegar a emitir a la atmósfera gases de efecto invernadero equivalentes a las emisiones que puede producir un coche en 15.000 kilómetros, o el fósforo existente dentro de una televisión puede llegar a contaminar hasta 80.000 litros de agua.
Además, ese incremento producido en la recogida separada de estos residuos provoca que cada vez sea mayor el número de estos residuos que se pueden valorizar nuevamente, evitando gastar materias primas, evitando su vertido directo y evitando daños al medioambiente.
Los materiales valorizables que contienen los aparatos eléctricos y electrónicos suponen un recurso que debe ser recuperado una vez se conviertan en RAEEs, a través del reciclado, de manera que esos recursos puedan ser conservados para futuras generaciones, en un claro ejemplo de aplicación de la economía circular.
El gerente del Consorcio de Residuos del Sector II, Jorge Velázquez, ha señalado que “como usuarios de estos productos, tenemos una responsabilidad sobre ellos; la mayor parte se pueden reciclar, pero muchas veces, por el desconocimiento de las posibilidades que ofrece el reciclado, acaban en vertederos”.
Por esta razón, insiste Velázquez, “debemos separar en el origen estos residuos y aprovechar los canales específicos destinados a ello”, por lo que “desde el Consorcio tratamos de ofrecer a los usuarios todos los medios a nuestro alcance para que esos residuos no acaben en los vertederos y podamos recuperar y aprovechar todo su potencial”.